Nevado de Colima

Cráter Volcán de Fuego
Cargado originalmente por Gildardo

Desde la ocasión anterior en que estuvo Jean-Claude en el campus me había dicho que le gustaría ir al Nevado de Colima. Total que platicándolo con los colegas, resultó que el buen Raúl Rodríguez (asistente IMT) es de Ciudad Guzmán y conoce las peripecias que hay que hacer para llegar, asi que el me ayudó a organizar el viaje. De hecho, terminamos yendo un buen de compañeros de trabajo: Yolanda, Olga, Karime, Raúl, Francisco, Gerardo, las novias de Raúl y Paco, Jean-Claude y un servidor.

Salimos el viernes en la tarde, luego de la conferencia de Jean-Claude, caminamos por el centro de Ciudad Guzmán y dormimos temprano. Al día siguiente salimos temprano a casa de Raúl, quien tenía listas dos camionetas 4x4 para el viaje y comida como para si fuéramos a ir al mismisimo Tibet.

Total que salimos muy entusiasmados, y después de un rato de brecha, y con polvo hasta en las pestañas, llegamos a la entrada del parque nacional. El buen Raúl había conseguido además que nos acompañaran de Protección Civil, asi que nos guiaron y nos acompañaron todo el camino. De ahi fuimos a dar hasta "Las antenas" que es lo más lejos que se puede llegar con coches. Estábamos un poquito abajo de 4000 m snm, y desde ahí se ve el cráter del volcán (que está a unos 5 km en línea recta) y por supuesto el pico más alto del nevado (el cual está a unos 4800 m snm).

Finalmente no nos permitieron subir, por cuestiones de seguridad, asi que tuvimos que conformarnos con andar como chivas locas ahi cerca y ya. Después de un rato, y de una caida de mi parte y otra de Karime (esta última castigo divino por burlarse de mí), regresamos a Ciudad Guzmán. Un baño, una rica comida-cena y listo. Unos regresaron a Guadalajara, otros se fueron a Manzanillo y JC y un servidor nos quedamos en Cd. Guzmán. El domingo temprano fuimos a La casa de los Patios en Sayula a desayunar y luego dejé a JC en el aeropuerto de Guadalajara.

Fue un viaje divertido. Hasta cierto punto reconozco que para mí fue mejor que no nos dejaran caminar. La verdad es que sí se nota la diferencia de altitud y me preocupaba un poco si podría resistir caminar 2 horas y media con la nula condición física que tengo a esa altitud.

Ya veremos dónde es la próxima aventura. Creo que mi viaje más próximo será el de Panamá... ya veremos.