sábado, diciembre 29, 2007

Discurso graduación

Se me había pasado mencionar. Este semestre fui honrado con la oportunidad de dirigir un mensaje a los alumnos que se graduaron ahora en diciembre. Es una distinción importante, y escribir el discurso se convierte en una tarea delicada, pues por un lado hay que cuidar mucho el tiempo, y por otro, aparecen mil ideas de cosas que quisiera decírseles a los chicos.

Total que después de meditarlo un poco, empecé a escribir... este es el resultado final:

Respetable Dr. Rafael Rangel Sostmann, Rector del Tecnológico de Monterrey

Señores miembros del presidium,

Estimados Graduandos,

Queridos Padres de Familia,

Amigos todos:

Cuando recibí la grata noticia de que tenía la encomienda de dirigir un mensaje a esta honorable audiencia sentí una gran emoción, pero cuando comprendí lo que significaba, sentí pánico. Como buen nerd que soy, tecleé en Google “Discurso graduación”, y 0.09 segundos después, aparecieron ante mi una serie de enlaces que iban desde anuncios que vendían discursos ya elaborados – 3 por 147.3 pesos, hasta los videos de discursos realmente históricos como el que hizo Steve Jobs en la Universidad de Stanford en 2005. No pude, aunque ya lo conocía, evitar escuchar de nuevo este último. Hacerlo me hizo recordar la época en que desarrollé mi tesis doctoral en esa misma universidad. Viví de nuevo momentos que han quedado indeleblemente grabados en mi mente. Pero también pensé inmediatamente que unos cuantos años antes, cuando estaba yo en una ceremonia como esta de aquél lado del escenario, siendo un recién graduado de ingeniería química, jamás me hubiera imaginado haciendo una maestría en el Tec de Monterrey una tesis de robótica en una universidad como Stanford. Ahí estaba yo, 17 años atrás, lleno de alegría, dispuesto a comerme el mundo a mordidas. Agradecido si, con mis profesores, pero ingenuo suficiente (y tal vez arrogante) para cuestionar la utilidad de conocimientos que había adquirido. ¿Para qué me iba a servir recordar cómo se integra una ecuación diferencial de segundo orden? ¿O qué importancia podría tener en la vida el álgebra lineal? ¿Y qué decir de la segunda ley de la termodinámica o de la ley de acción de masas? Yo creía saberlo todo, o al menos mucho. Tenía ya un trabajo y lo disfrutaba. Era un buen momento. Hoy día puedo decir que esos conocimientos que llegué a pensar futiles, resultaron ser la herramienta que ha permitido desarrollar métodos que un científico computacional puro no vería por no tener esa formación más amplia. Esos conocimientos me permiten hoy día interactuar con científicos de otras áreas para tratar de desentrañar misterios de la naturaleza. Los años me han enseñado que no hay nada que uno pueda aprender que no tenga una utilidad en algún momento de la vida. El cerebro debe ser como una esponja siempre absorbente. El profesionista exitoso de este siglo debe tener un conocimiento como una T, cubriendo de manera superficial muchas áreas y profundizando en una de ellas. Todo el conocimiento es importante y puede ser valioso.

Volviendo a la época de mi graduación….. tres meses después de ella, la vida me dio un golpe terrible. Mi madre murió repentinamente. No tuve oportunidad de agradecerle su cariño, su apoyo y su amor. Eso ya no podía cambiarlo. Lo que sí podía hacer era mostrar ese amor a quienes aún estaban conmigo. No vale la pena desperdiciar la vida lamentando aquello que dejamos de hacer. Es mejor hacerlo. Digan a la gente que aman cuánto les importa. Demuéstrenles que son importantes en su vida. Hoy es un buen día para empezar.

Ese hecho me motivó a tomar la decisión de concluir mi tesis de licenciatura, que había dejado casi en el abandono por dedicarme al trabajo. Con ello descubrí que hay dos cosas muy importantes para lograr las metas: amar lo que haces y ser tenaz en ello. Y aprendí que se requieren ambas. Busquen aquello que quieren amar y confíen en que su corazón les hará saber cuando lo hayan encontrado.

Ustedes son afortunados porque forman parte de una minoría de este país que logra concluir sus estudios profesionales y aun más si consideramos que egresan de la mejor universidad privada en México. Pero por favor, no vivan en una burbuja. Lamento ser dramático en este momento tan alegre, pero es momento de cuestionarnos ¿Qué vamos a hacer todos nosotros para que eso cambie? ¿Qué está en nuestras manos? Algunos de ustedes probablemente tengan un origen como el mío, con padres que tuvieron que dedicar buena parte de su salario a ayudarlos a estudiar. Otros probablemente provengan de familias con menos restricciones económicas, pero todos tenemos la gran oportunidad de ayudar a hacer de este un país más equilibrado, en la medida de nuestras posibilidades. ¿Quiénes quieren tomar el llamado?

Finalmente, a nombre de toda la comunidad académica, les digo que esta será siempre su casa. Vuelvan cuando gusten y sean dignos Ex-A-Tecs. Que su paso por la vida sea trascendente.

¡Muchas gracias!

Leerlo fue muy emotivo, al menos para mi. Y hubo incluso un momento en que se me fue la voz. Una cosa es cierta. Iba lleno de emociones y espero haber transmitido eso. Por cierto, no... este no era uno de los que vendían en Google. Lo escribí yo solito :-D

4 comentarios:

Knar dijo...

EXTRAORDINARIO me encanto tu discurso, esta bien padre Gil, yo la verdad ni recuerdo el discurso que dieron en mi graduacion fue muy X, pero el tuyo esta muy bien que chido, algun dia me lo voy a fusilar jajajaja no te creas.

Cuidate mucho GIL

FELIZ AÑO!!!

Gildardo dijo...

Muchas gracias Knar. ¡¡Cuando quieras!!
Je je.

Un abrazo para ti!!!

Anónimo dijo...

No no, de haber sabido que eras tu el encargado del discurso hubiera asistido sin falta. Triste que me vengo enterando un mes después. Buen discurso (aunque quizás un poco cortito). ¡Felicidades por el honor de dar un discurso de graduación!

Gildardo dijo...

Muchas gracias Maic ;-)

Pues al orador interno le piden que no exceda los 5 minutos, que si no... me quedo hablando una hora, ja ja.

No, la verdad hacer un discurso más largo en una ocasión como esta puede ser muy tedioso (había creo que como 400 graduandos, asi que imagínate lo que se tarda el Dr. Rangel en darles el título a cada uno).

Un abrazo